viernes, febrero 22

Antes de ayer.

18:20
-Un phillip común y dos chocolates.
-Son doce con cincuenta.
-Gracias.


Nubes. Llueve. Melancolía gris.
Las gotas rozándome, con su frío relajan mis tensos músculos.
El viento no me deja abrir los ojos... ni prender el cigarrillo.
Caminar sin rumbo, casi tan peligroso como andar sin tiempo.
Sin tiempo ni lugar, sin destino.
No planeo, me dejo llevar por mis pensamientos.
Pequeña alegoría de la vida: decidir, sin saber, nuestro camino.
En un suspiro se escapa el calmante humo.
Quiero llorar, quiero reír... pero mi cuerpo parece no enterarse.
De a poco esa nada, ese todo se apodera de mi mente.
Puedo sentir el aire entrando en mí, con cada respiración.
Estoy mojada, ya lo sé, solo que apenas hace un instante comenzó a molestarme.
Bajo el paraguas emprendo el regreso.

Tres llamadas perdidas. Dos papeles de chocolate. Un atado semivacío. Tranquilidad.
19:50