viernes, agosto 24

Nunca dejes de intentar

Es más fácil enojarse que escuchar... ¿Cuántas veces más vas a elegir lo fácil?
El miedo a abrir los ojos, a ver más allá de tus paredes de cristal. El miedo a sufrir.
¿Es miedo realmente? ¿Comodidad? ¿Cobardía?
Ojalá puedas mirar... y ver.
Y cuando veas no te des la vuelta asustada.
Porque atrás de cada lágrima, hay una carcajada esperando.
Y da miedo, si. Y duele, enoja, agota... si.
Pero vale la pena abrirse a vivir.
Cuando rompas ese vidrio protector que te armaste, espero que puedas ver que no es por forra... sino porque te quiero, y porque, aunque vos no creas en el mundo, yo creo en vos.

No hablo desde la ignorancia, ni desde la omnipotencia. No me las sé todas, pero un poco aprendí.
No tendré tantas excusas friamente calculadas para la ocasión, ni ganas de discutir.. No pongas más excusas, las cartas ya están sobre la mesa.